El senador que dirige una investigación del Congreso sobre la gestión de la pandemia de COVID-19 en Brasil ha recomendado que el presidente Jair Bolsonaro sea acusado de homicidio por los supuestos errores del gobierno que provocaron la muerte de miles de personas.
Bolsonaro ha rechazado la investigación por motivos políticos. Es muy poco probable que se enfrente a un juicio por tales cargos, que tendría que ser presentado por el fiscal general de Brasil que Bolsonaro nombró.
El documento de casi 1.200 páginas, preparado por el senador de la oposición Renan Calheiros para una comisión del Senado que llevó a cabo la investigación, alega que Bolsonaro rechazó oportunidades tempranas para que el gobierno adquiriera vacunas, retrasando la campaña de inoculación de Brasil y costando unas 95.000 vidas.
El informe dice que Bolsonaro se guió “por una creencia infundada en la teoría de la inmunidad de manada por infección natural y la existencia de un tratamiento.”
“Sin la vacuna, las muertes serían estratosféricas, como resultaron ser”, añade el informe.
El proyecto de informe aún debe ser votado por la comisión del Senado y podría ser vetado y modificado. La votación está prevista para la próxima semana.

La Presidencia y el Ministerio de Sanidad no respondieron inmediatamente a las peticiones de comentarios.
Más temprano el martes, Bolsonaro dijo a sus partidarios que la investigación era una “broma” y dijo que no estaba preocupado por ella.
El informe también dice que se deben presentar cargos contra tres de los hijos de Bolsonaro: El senador Flavio, el diputado federal Eduardo y el concejal Carlos. El informe alega que difundieron información errónea que incentivó “el incumplimiento de las medidas sanitarias para contener la pandemia.”
Con más de 600.000 personas, Brasil es el segundo país del mundo con mayor número de muertes por COVID-19, sólo por detrás de Estados Unidos.
Bolsonaro ha sido ampliamente criticado por los expertos en salud pública por arremeter contra los cierres, negarse con frecuencia a usar una máscara en público y declarar que no se ha vacunado.
También ha impulsado remedios no probados para la enfermedad, como el fármaco antipalúdico hidroxicloroquina.
El informe dice que Bolsonaro es “el principal responsable de los errores cometidos por el gobierno durante la pandemia de COVID-19” y que actuó en contra del consejo de su Ministerio de Salud al apoyar el uso de tratamientos no probados.
En total, el informe recomienda que se presenten 13 cargos penales contra Bolsonaro, incluido el genocidio contra la población indígena de Brasil por las acciones que dejaron a sus comunidades vulnerables al virus.